El Gobierno definió la fórmula de actualización para las jubilaciones que quiere aplicar en 2021. Pero la iniciativa deberá pasar por el Congreso de la Nación para su tratamiento.
El oficialismo resaltó que la nueva ecuación “generará un incremento del poder adquisitivo de los haberes; gracias al aumento del salario real y de los recursos de ANSES”. En este caso, no se incluirá la tasa de inflación; los aumentos regirán en base a la evolución de los salarios y la recaudación por parte del Estado.
¿Cómo cambia en los haberes de los jubilados?
Desde el Gobierno explicaron que la nueva fórmula se asemeja a la utilizada durante el gobierno de Cristina Kirchner, que estuvo en vigencia hasta el 2017 cuando la derogó la gestión de Mauricio Macri.
ANUNCIO. La Anses prorrogó hasta fin de año la suspensión del trámite de fe de vida para cobrar jubilaciones. TÉLAM.
“Una fórmula atada a la inflación no es deseable en la Argentina. Porque los ingresos de los jubilados han perdido poder adquisitivo y el objetivo político es recomponer esos ingresos", explicó el Ministerio de Economía a través de un comunicado.
¿Cómo impacta en el bolsillo?
Desde el Ministerio de Economía se remarcó que la ecuación a utilizar se basará en la evolución de los salarios y la recaudación en partes iguales, por lo que la tasa de inflación ya no será parte.
En los cajeros automáticos.
"En diversos países, las fórmulas de movilidad se basan en inflación siendo que los precios en esos países crecen menos que los salarios -dice el comunicado-, lo cual quiere decir que no hay un objetivo de recuperación real de los ingresos. Además, los niveles promedio y las variaciones de la inflación en esos países son mucho más bajos que los que se observan hace lustros en Argentina, lo cual les permite dar cierta previsibilidad al gasto previsional”, agregaron desde la cartera que conduce Martín Guzmán.
¿Por qué se incluye la recaudación en la nueva fórmula?
Desde el Gobierno explicaron que al incluir la recaudación en la fórmula, el ministro Guzmán apunta a cuidar la sustentabilidad fiscal.
Los técnicos de Economía entienden que la nueva ecuación permitirá reducir el actual déficit previsional, dado que, si bien el salario real aumenta junto con el crecimiento económico, lo hace menos que los recursos tributarios.
Por otro lado, se reincorporará el tope a los aumentos anuales, que no podrán ser superiores al crecimiento de los recursos totales de Anses (multiplicado por 1,03). Este tope estuvo vigente entre 2009 y 2017 y representa una pieza clave para evitar que los gastos crezcan sistemáticamente más que los recursos y el déficit previsional crezca sin control (como sucedió entre 2016 y 2019).
Esta condición de sustentabilidad había sido eliminada con la reforma del 2017. Mientras que la evolución salarial se medirá con el RIPTE, adelantó el Poder Ejecutivo.