GINEBRA, Suiza.- Los casos de coronavirus en el mundo rozan los 40 millones en medio de un segundo brote de contagios que afecta a Europa y que llevó a varios países, como Francia, a iniciar un toque de queda, y a Suiza a imponer el uso obligatorio de barbijos en espacios cerrados.
En enero, un mes después de la aparición de la covid-19 en la ciudad china de Wuhan, se dio a conocer el primer caso activo en Europa. Desde ese momento, la región acumula más de 7,3 millones de casos y 250.000 muertes, de las cuales más de dos tercios se concentran en cinco países: Reino Unido, Italia, España, Francia y Rusia.
Europa es la segunda región más afectada por la pandemia, detrás de Latinoamérica y el Caribe, por delante de Estados Unidos y Canadá y Asia. La situación se agravó en los últimos días, cuando hubo 8.342 muertes, el mayor número en una semana en la región desde mayo.
La pandemia modificó el paisaje en la capital francesa. París quedó silenciosa y sus calles, vacías, con negocios, restaurantes y barres cerrados, a raíz del toque de queda que comenzó a regir el sábado, tras el aumento de casos en Francia, que batió el récord de 32.000 contagios en un día.
Se impuso toque de queda, de 21 a 6 durante cuatro semanas, en ocho ciudades, además de la capital francesa, que no veía una medida como esta desde 1961, durante la guerra de Argelia.
El gobierno de Suiza también comunicó nuevas medidas, como el uso obligatorio de barbijo en sitios públicos abiertos y cerrados y reuniones limitadas a 15 personas. Cientos de personas se manifestaron en contra frente al palacio federal de Berna.
El malestar también se expresó en República Checa. Efectivos de la Policía reprimieron en la plaza de la Ciudad Vieja de Praga de una protesta de hinchas de fútbol y de hockey por la prohibición de asistir a los partidos de deportes profesionales. (Télam)