A partir del miércoles 1 de julio y hasta el 17, el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) tendrá un estricto aislamiento social preventivo y obligatorio. El presidente Alberto Fernández anunció ayer que esta zona urbana, que conforman la Ciudad de Buenos Aires y 40 municipios de esa Provincia, es el epicentro de los contagios por coronavirus.
“Los casos aumentaron exponencialmente y a una gran velocidad; el 97% de los casos ocurren en el AMBA”, marcó el jefe de Estado. Y agregó: “en los últimos 20 días los casos aumentaron un 147% y los fallecidos, un 95%; necesitamos ganar tiempo para parar el ritmo de contagio”.
En un mensaje grabado junto al gobernador bonaerense Axel Kicillof y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, Fernández remarcó que se va a aislar AMBA para reducir drásticamente la circulación. “El área metropolitana está contagiando al resto del país; desde el primero de julio hasta el 17, les pido a todos que se queden su casa y salgan para lo esencial”, clamó. Sólo podrán circular trabajadores de servicios esenciales.
Cierre del AMBA
El mandatario, que señaló también que Chaco es otro foco de contagios pero de menor incidencia, explicó que son tres objetivos que se buscan con el cierre del AMBA. El primero es preservar a los ciudadanos de allí. El segundo, evitar que el virus se disperse hacia las provincias. “Tenemos que hacer un esfuerzo enorme, hay que ser solidarios con el resto del país”, ahondó.
En tercer término, Fernández explicó que en las últimas semanas hubo un crecimiento exponencial de ocupación de camas de terapia intensiva en el área metropolitana, donde reside el 37% de los argentinos. “Hay que volver a cerrar el AMBA para que la circulación disminuya drásticamente. Reduciendo la circulación, vamos a reducir los contagios. Reduciendo los contagios, vamos a desacelerar la ocupación de camas. Y mientras esto ocurre, vamos a ir liberando las camas de gente que hoy está enferma”, detalló.
El coronavirus ya se cobró casi 1.200 vidas en la Argentina.
En cifras
Apoyado en gráficos, el Presidente mostró que de los contagiados en el país, unos 47.000 residen en el AMBA y casi 6.000 en el resto de las provincias. Señaló también que de las 472 camas de terapia ocupadas hasta el 25 de junio, 424 eran de Buenos Aires y 38 del resto del país. Esos números representan que ya están cubiertas más del 50% de las camas de cuidados intensivos en esa zona urbana.
Impacto económico
Fernández rechazó que se haya enamorado de la cuarentena. “Es un remedio para la pandemia, y es el único que conocemos. Estamos enamorado de la vida, por eso nos pesa tanto el número de personas que dejó de estar con nosotros”, expresó.
El jefe de Estado resaltó que América Latina es el epicentro de la pandemia e insistió con que el esfuerzo de 100 días de aislamiento no fue en vano. “Si no hubiéramos hecho esto, todo hubiera sido más grave. No tenemos que enojarnos con el remedio, sino con la enfermedad”, dijo.
En ese sentido, Fernández, mostró las consecuencias económicas que proyecta FMI, con una caída del PBI de casi el 10%, similar al de las grandes potencias del mundo. “Los resultados son exactamente los mismos que los de la Argentina. En cuanto a los muertos, la Argentina se distingue del resto. El problema no es la cuarentena, es la pandemia”, dijo. Y sobre el final, agregó: “valoro mucho la libertad, pero para ser libres primero hay que vivir. Cuidemos la vida”.
Puntos claves
1- La Ciudad y la Provincia de Buenos Aires endurecerán drásticamente el aislamiento desde el 1 de julio al 17 para frenar la circulación de coronavirus.
2- En esos días, sólo podrán circular los trabajadores de servicios esenciales. Además, se pidió a la población quedarse en sus casas y comprar sólo lo básico.
3- Las medidas se toman porque los casos crecieron de manera exponencial en el AMBA. Ya están ocupadas el 50% de las camas de cuidados intensivos.