De lunes a viernes a las 21:30 por la pantalla de El Trece, Guido Kaczka conduce Otra noche familiar. El ciclo cuenta como principal atractivo con un juego de preguntas de interés general en el que los participantes tienen la ventaja de poder estudiar las respuestas con anterioridad.
La buena memoria y contestar lo más rápido posible es clave para ganar y obtener un viaje para dos personas a Punta del Este. En cambio, quienes pierden se van con las manos vacías y uno de los jugadores cae a un "pantano" y queda empapado.
En la emisión de este miércoles, Paula fue con su novio y lamentablemente no llegó a la final, por lo que terminó cayendo al agua. Sin embargo, durante el juego tuvieron una actitud por demás sospechosa.
En un momento del juego, hubo dos preguntas que el joven parecía no recordar pero que finalmente fueron contestadas correctamente luego de que su novia lo alentara de una forma particular. En ambos casos, él eligió la primera opción.
El joven, que estaba abajo y era el encargado de decir las respuestas, consultaba con su novia cada palabra que decía. En algunas oportunidades ella le aseguraba no recordar la pregunta en cuestión, pero cuando eso no ocurría ella lo llamaba "Pi".
La primera vez que eso sucedió fue cuando Guido hizo la pregunta 844 de las 4.020 que tiene el juego: "¿Con qué político está casada y tiene un hijo la actriz Carla Peterson? Martín Lousteau o Juan Manuel Urtubey". Y ante la duda, el participante le dijo a su novia: "Esa va para vos, gorda… ¿La tenés?… ¿La sabés?… Yo te veo la cara…".
"Acordate, Pi. Te la sabés", le contestó la muchacha, y al parecer el hombre recordó la respuesta y contestó de forma correcta.
Unos minutos después, ocurrió exactamente lo mismo con una nueva pregunta sobre la saga de películas Indiana Jones. "Pi, te la dije hoy", exclamó en ese momento la mujer. "Sí, me acuerdo, me acuerdo, en el auto viniendo…", aseguró el concursante antes de responder bien.
Casualidad o trampa, cada vez que ella le decía "Pi" y aseguraba saber o recordar la respuesta, él elegía la primera opción que le daba Guido, que era la correcta y cada vez que ella decía no saber la respuesta, él optaba por la segunda opción, que era la que valía.