La Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), representación política de la comunidad judía en la Argentina, anunció ayer que “no tiene intención de desistir” de la querella contra la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner en la causa por el memorando de entendimiento con Irán, por el cual se intentaba revisar la investigación de la Justicia local sobre el atentado a la AMIA, pero aclaró que “someterá el caso a la consideración” de las entidades que la componen.
“La entidad hace saber que no tiene la intención de desistir de la querella, pero someterá el caso a consideración de todas sus instituciones adheridas y filiales del país. La DAIA desconoce los motivos por los cuales la AMIA (Asociación Mutual Israelita Argentina), una de sus más de 120 entidades adheridas, le ha dado estado público a la cuestión”, sostiene un comunicado difundido por las autoridades de la Delegación.
El jueves, la AMIA hizo pública una carta en la cual le pidió a la DAIA que desista de mantener la acusación contra la ex mandataria por encubrimiento del atentado contra la mutual judía, ocurrido en 1994.
Según estableció el juez Claudio Bonadio, tras hacer lugar a la denuncia del fallecido fiscal Alberto Nisman, el pacto firmado en 2013 con Irán para que ciudadanos de ese país, sospechosos del ataque a la mutual, declararan en la causa, constituyó una maniobra de encubrimiento de un acto terrorista, orquestado por Cristina y varios integrantes de su gobierno.
En el escrito que firma Jorge Knoblovits, presidente de la DAIA, se asegura sobre el proyecto de juicio en ausencia contra los iraníes acusados de la autoría intelectual del atentado -que la AMIA resiste-, que “se está analizando, sus implicancias y alcances”. “La DAIA anhela, como siempre, seguir construyendo una comunidad judía unida, abierta al diálogo, respetando las incumbencias y misiones institucionales”.
La contraparte
Por su lado, el presidente de la AMIA, Agustín Zbar, sostuvo: “no me animo a decir que el memorando (con Irán) era un pacto de impunidad”, y resaltó que la mutual judía “nunca acompañó la querella que instó la DAIA contra la ex presidenta Cristina Fernández por haberlo firmado; “es una decisión que la AMIA nunca acompañó”.
“Nosotros no consideramos que la comunidad judía fue particularmente damnificada sino que toda la Argentina lo fue”, señaló el dirigente en declaraciones radiales. Por lo que insistió: “no me animo a decir que el memorándum era un pacto de impunidad con Irán. Les tengo que dar el beneficio de la duda. Había gente que creía que era una manera de esclarecer la causa. No puedo asignarles ‘mala fe’ pero fue una decisión tremendamente desacertada y muy perjudicial para el país”.
Consultado sobre la denuncia del fiscal Nisman o de la hipótesis de que pueda haber una maniobra que perjudicara la causa, opinó: “nunca corresponde decir que algo es un delito hasta que un juez no lo determine”. “Las razones políticas por las que la Argentina firmó el tratado y lo ratificó en el Congreso lo debe resolver la política”, agregó. Y acotó: “no debemos distraernos en esta discusión fuertemente política, y mucho más en un año electoral en el que va a comenzar un juicio oral contra la ex presidenta por este motivo. Ese no es el lugar donde nosotros buscamos justicia para la AMIA”.
“Me da asco”
En tanto, el diputado Waldo Wolff (Cambiemos) cuestionó a Zbar y dijo por la misma radio que le “da asco” la actitud del dirigente porque, indicó, “termina de dar una voltereta enorme, abrazado con (Gregorio) Dalbón, y lo mismo que se abraza con (Nicolás) Maduro y con los acusados de ponernos la bomba. Si la grieta nos va a dividir entre los que queremos que se investigue y los que no, la situación se torna ridícula. No voy a ser yo cómplice de este manejo”.
Y Zbar le contestó. “Tendrá motivaciones políticas para pensar así, pero el interés de la AMIA no es juzgar a un gobierno en particular ni las medidas que toma, sino conocer la verdad sobre el atentado”. (Télam)