Turismo

San Lorenzo ofrece recreación, naturaleza y gastronomía para el verano

La villa veraniega se convirtió en uno de los destinos elegidos por salteños y turistas.
03 Ene 2015
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A minutos de la ciudad, el paisaje natural se mezcla con ofertas gastronómicas, hoteleras y recreativas en la villa veraniega de San Lorenzo.

San Lorenzo se caracteriza por sus cordones montañosos precordilleranos, acompañados de cerros y marcados por ríos.  Y en ese escenario se hace posible el turismo de aventura, el ecoturismo y la observación de flora y fauna. 

Un dato importante es el clima, que es agradable todo el año y permite a los visitantes disfrutar de alternativas como paseos, trekking y cabalgatas.  Otras opciones son los paseos en bicicleta y safaris fotográficos.  

La Quebrada

Uno de los lugares más visitados de San Lorenzo es la famosa quebrada que lleva su nombre. En el corazón verde de la zona, en medio de la naturaleza, al pie de las montañas, se encuentra esta reserva natural contenida en el ambiente de Las Yungas, en la Selva Montana. 


En la quebrada se pueden hallar senderos bien delimitados que permiten hacer un recorrido corto a pie.

En cualquier época del año, familias enteras de salteños y turistas eligen pasar el día allí. Es común ver a grandes y chicos tomando mates con tortillas a la parrilla, comprando productos artesanales, haciendo alguno que otro asado, y por supuesto, disfrutando de tranquilidad del lugar.

Pero además, el local gastronómico conocido como "El duende de la quebrada", se muestra imponente, al lado del río que trae aguas cristalinas y murmullos frescos.




Arquitectura y sabores

La arquitectura de la zona también resalta por el valor histórico de viejas casonas junto una variedad de diseños, con enormes residencias que parecen tomadas de algún filme exótico.

Hoteles, hostales, hoteles boutique, cabañas, residencias y casas de campo forman parte de una infraestructura de alojamiento que se fusiona con el paisaje.

La gastronomía es variada y se mezcla en edificaciones con diseños aútoctónos y otros exóticos.  Por ejemplo, el Castillo de San Lorenzo brinda opciones para paladares exigentes en un lugar que sobresale por su estructura.

Con una visión vanguardista con retoques clásicos, Casa Pueblo es un lugar especial para compartir ricos platos y visualizar una cava que deja boquiabierto al visitante. La colección de vinos se encuentra en un subsuelo y se puede ver desde el salón principal a través de un piso de vidrio y transparente. 

Quienes busquen ambientes familiares con opciones que incluyen parrilla, podrán encontrar seguramente en "Campo Adentro" la oportunidad para comer bien.

En San Lorenzo también hay lugares que son ideales para ir a almozar, cenar y también merendar como Don Sanca o Valentina, ubicados sobre la avenida que conduce a la Quebrada. 


Además, El Paseo de la Quebrada es otra muestra de variedad para quienes desean ir a comer, ya que cuenta con diferentes locales, que incluyen una pizzería y una heladería.

A todo esto se le suman opciones para todos los bolsillos, y seguramente entre los árboles y la frescura sanloreceña, los visitantes encontrarán empanadas, humitas y tamales.

Piletas

La villa cuenta con muchas casas con piletas pero también hay instalaciones públicas para los que buscan refrescarse como el Complejo Los Ceibos o las insalaciones del IPS.



Otros lugares

Los visitantes que llegan por primera vez, seguramente querrán preguntar por otros lugares encantadores para conocer en la zona. Algunas respuestas las encontrarán en Finca Las Costas, en Loma Balcón, en la Quebrada de Arteaga, en Potrero Grande o en Puerta del Cielo.

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