Hace poco menos de una semana, la Dirección General de Drogas Peligrosas de la Policía de Tucumán detuvo a Jesús Enrique Méndez, hermano del intendente de Salvador Mazza, Rubén Méndez. El hombre llevaba 6 kilos y medio de cocaína que tenían previstos ser distribuidos para la venta en más de una decena de quioscos que estaban instalados en diferentes barrios del Gran San Miguel de Tucumán.

Los investigadores sospechan que Méndez era el encargado de distribuir la “merca” a los tucumanos que tenían puestos de narcomenudeo.

Junto al salteño fue atrapado un ciudadano norteamericano que tiene nacionalidad boliviana. Este, de acuerdo a las hipótesis que manejan las pesquisas, podría ser el proveedor de la cocaína.

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Sin embargo a los investigadores les resulta extraño que el norteamericano haya decido viajar con la droga desde Bolivia, ya que normalmente no llegan hasta nuestro país.

En las últimas horas trascendió que entre los aprehendidos aparecen dos conserjes de una escuela secundaria de la capital tucumana.

Ese dato se difundió después de que los investigadores recibieran un informe detallado de las actividades que realizaban los sospechados de narcomenudeo. Allí aparecen que un tal “Rolo” y una tal “Sofy” estarían trabajando en la escuela de Comercio N°4.

Fuentes judiciales confirmaron a LA GACETA que no existen indicios de que los sospechados hubieran vendido dosis en el establecimiento educativo que está instalado en el barrio Oeste II, al oeste de la capital tucumana.

Además de esta pareja, fueron detenidos al menos otras 12 personas que manejaban diferentes puestos de drogas.