Argentina producirá sus propios tests de coronavirus

Un test de base molecular rápido, sensible, de bajo costo y sencillo de operar. Esas son las características del Neokit-Covid-19, la prueba de coronavirus que Argentina ya ha comenzado a producir y diagnostica la nueva enfermedad en menos de dos horas. Ayer, durante la presentación del invento en la Quinta de Olivos, Alberto Fernández anunció que desde ahora enfrentará el control de la pandemia de otro modo: “nos permite conocer rápidamente qué enfermo está infectado y cuál no, y tratarlos a partir de allí. También nos permite conocer quién está infectado y no tiene síntomas, que es uno de los problemas de los que siempre hablamos”.

El test fue desarrollado con fondos de los contribuyentes y por investigadores de la empresa de base tecnológica Neokit, conformada sobre la base de un consorcio público-privado entre el Laboratorio Pablo Cassará y el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet). Integraron el equipo Adrían Vognov, Carolina Carrillo, Luciana Larocca y Fabiana Stolowicz, del Instituto de Ciencia y Tecnología Milstein, y Santiago Werbajh, de la Fundación Cassará.

Según el comunicado emitido después del anuncio, el Gobierno “proyecta una producción local de casi 500 kits por semana”. Si bien en la información difundida no se aclara para cuántos tests sirve cada kit, la Nación prevé producir los primeros 10.000 tests durante los próximos 10 días y luego llegar a elaborar 200.000 por mes.

Más veloz que la PCR

A la hora de investigar, los científicos asumieron que la obtención de información y diagnósticos precisos acerca del virus es una herramienta fundamental para disminuir su circulación. Y, de hecho, el Neokit-Covid-19 permite testear muestras de ácido ribonucleico (ARN) en menos de dos horas, mientras que el método generalizado (la reacción en cadena de la polimerasa, o PCR) conlleva una duración de siete horas.

El nuevo test también tiene la ventaja de que puede mantenerse a temperaturas de entre cuatro y ocho grados, sin la necesidad de un freezer. Además, ya fue aprobado por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat). Y el Instituto Malbrán había contribuido con la provisión de las muestras de ARN purificado de pacientes positivos y negativos para el test de validación.

“Esto es soberanía”

Fernández presentó el nuevo kit junto a los ministros de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, Roberto Salvarezza, y de Salud, Ginés González García. En su discurso, el mandatario destacó que la prueba haya sido creada por investigadores argentinos y vaya a ser producida por un laboratorio también nacional.

“Tenemos la mejor calidad humana y científica para ofrecer estas respuestas -opinó-. Esto es importante para el desarrollo de un país porque demuestra que no dependemos de otros, que podemos hacerlo. Esto es soberanía y eso es lo que todos deben entender”. Y además aprovechó para apuntar contra personas a las que dejó sin identificar: “les decimos los que piensan que Argentina está condenada a tener un rol de segunda en el mundo que somos capaces de hacer esto”.

De manera parecida, el documento difundido por el Gobierno declara: “este logro significa un paso más de la ciencia argentina hacia la soberanía tecnológica. Además, demuestra la calidad de nuestro sistema científico, que en menos de dos meses ha respondido con soluciones concretas a la emergencia sanitaria. El trabajo de investigadores en conjunto con empresas del sector privado es la prueba del potencial de desarrollo que tiene nuestro país”.

Testeo descentralizado

Por su parte, el ministro de Salud remarcó: “el sistema es tan simple que se podrán hacer con gente menos calificada y en forma descentralizada”.

También participaron del encuentro la titular del Conicet, Analía Franchi, y los científicos Vojnov y Carrillo.